jueves, 20 de octubre de 2011

Elevan a juicio una causa por torturas o sufrimientos innecesarios a animales


El imputado es un sargento que cumple funciones en el Cuerpo de Canes de la Policía de Mendoza. La causa se hizo pública en febrero del año pasado cuando trascendió un video del adiestramiento de un perro.


lunes, 17 de octubre de 2011


Un bloodhound. Animal con el olfato más fino del planeta, cuyo adiestramiento motivó una denuncia a la Justicia.


Fue elevada a juicio una causa cuya calificación legal habla de "torturas o sufrimientos innecesarios a animales". El imputado es un sargento de la policía de Mendoza, y se anticipó que el debate se desarrollará en breve. El caso tuvo como denunciante a la Asociación Reencuentro por la vida Animal (Asoreva), con el patrocinio del abogado Oscar Alfredo Mellado y fue instruida por Juan Gabriel Tichelli, titular de la Unidad Fiscal departamental de Luján.

Según consta en la elevación a juicio, este hecho se remonta al mes de febrero de 2010, cuando en el interior del Cuerpo de Canes de la Policía de Mendoza, un sargento ayudante de la misma, identificado como Héctor Marcelo Tello, de 46 años, durante una sesión de entrenamiento canino y frente a un animal llamado Baloo, de raza bloodhound, "lo ahorcó en forma intencional en varias ocasiones con un collar de ahorque, dejándolo colgado varias veces y también lo arrastró por el suelo", lo que se traduce en torturas y sufrimientos innecesarios contra el animal.

El tema se conoció cuando trascendió a los medios un video donde se da cuenta del maltrato al animal y así se sumaron fotos y testimonios al expediente N° P-64.335/10. La fuerza contestó que el sargento ayudante Tello, era "idóneo en el adiestramiento de canes".

Donado a la policía
Este animal fue donado al Cuerpo de Canes de la Policía por su dueña, después de un tiempo en el que el perro demostró una conducta difícil de manejar. Explicó que lo que más le preocupaba era cuando el can se cegaba y "en ese momento era difícil dominarlo".

Tras asegurar que era un perro "indomable", optó por donarlo a la fuerza policial.

Los testigos aportados a la causa por el lado de la policía, hablan de que "nunca vieron a Tello maltratar a un animal", mientras que otros destacan el trabajo del sargento ayudante, concluyendo que gracias a esa tarea "el perro se está adaptando".

Por su parte Jennifer Audrey Ibarra, médica veterinaria y presidente de la Fundación Cullenche, quien fue la receptora del video, reconoció que el video muestra que "al perro se lo maltrata, se hace manejo y dominio del animal, apelando a la hipoxia por asfixia...".

Más adelante destacó que "se ve al perro literalmente desmayado, que hasta aparenta estar muerto y se ve que el animal no respira". Y concluye afirmando que a su entender "el perro sufrió un acto de maltrato".

Otros organismos como la Policía de Seguridad Aeroportuaria en su informe destacan que "la maniobra observada no se corresponde a ninguna técnica habitual de adiestramiento canino", mientras que Gendarmería Nacional, destaca que "la persona al perder el control sobre el mismo, no se sabe si por temor o por exceso, ejerce maniobras bruscas sobre el cuello del animal que producen la pérdida de reacción del mismo".

"No tuve intención"
El sargento de la policía imputado, en su declaración aseguró que "en ningún momento" su "intención fue dañar al ejemplar", oportunidad en que reseñó que era una sesión de adiestramiento normal, y que en un momento dado el perro saltó hacia él. El efectivo usó el único elemento que tenía para defenderse que es la correa y el collar de ahorque. Luego de sacar al perro de encima suyo, el mismo no cesaba, seguía atacando.

Al ser un animal terrestre lo levantó del piso para bajar su grado de agresividad; no lo dejó caer al suelo sino que lo depositó y en ese momento comenzó a girar intentando cabecear, tratando de sacarse el collar. Y después de reiterar que nunca el perro quedó asfixiado, concluyó argumentando que una vez que el animal dejó de atacarlo, lo acarició y lo calmó.

En la actualidad, el perro cumple funciones en tareas de rastreo y en la brigada de exhibición dentro del Cuerpo de Canes de la Policía de Mendoza.



Fuente: http://www.losandes.com.ar/notas/2011/10/17/elevan-juicio-causa-torturas-sufrimientos-innecesarios-animales-600550.asp

1 comentario:

Anónimo dijo...

porque no se pone el collar en su cuello e intentamos ajustarlo como lo hizo con el perro hasta que los ojos se le empiecen a explotar para afuera....total despues decimos que no fue intencional...hdp!