En Asia se consume mucho las aletas de tiburón en sopas. |
2011-10-22 PANAMÁ. Luego del desmebramiento de dos mil tiburones en el Santuario de Flora y Fauna de Malpelo, en Colombia, los grupos ambientales en Panamá se han pronunciado en contra de esta acción.
El grupo ecológico Fundación MarViva envió un comunicado en el que rechaza la pesca ilegal y el aleteo de tiburón que realizan barcos pesqueros en áreas marinas protegidas. Y la Asociación Nacional para la Conservación de la Naturaleza (ANCON) no se quedó atrás. Alida Spadafora, directora ejecutiva de este grupo ecológico, dijo que se adhería a las voces que han condenado esta matanza dado que esto atenta contra un recurso que se encuentra en peligro de extinción. ‘Es inaceptable. Esperamos que las leyes caigan con todo su peso a los culpables de esta acción’, sentenció Spadafora.
La masacre de tiburones, que se registró el pasado viernes, fue denunciada por la Alta Consejera Presidencial para la Biodiversidad, Sandra Bessudo, quien manifestó que embarcaciones de bandera costarricense habrían aprovechado la ausencia de guardacostas de la Armada Nacional para capturar los ejemplares y quitarles las aletas para comercializarlas en el mercado asiático.
La Fundación MarViva pidió que los hechos ocurridos no se repitan y que los gobiernos sancionen de forma ejemplar la pesca ilegal, especialmente aquellas que se dan en áreas marinas protegidas, y sitios declarados patrimonio de la humanidad.
UNA FUENTE DE RECURSO
Según el grupo ambiental, este tipo de delitos es cada vez más frecuente y atenta contra la sostenibilidad de los recursos marinos y la subsistencia de comunidades e industrias que tienen en estos animales su principal fuente de recurso.
Tras la acusación de que buques con banderas costarricense son responsables de este crimen, la cancillería de este país se ha pronunciado. Ha solicitado al Gobierno de Colombia información para descartar o ratificar la participación de naves de Costa Rica en este delito ecológico.
El gobierno, además, en un comunicado defendió la pesca ilegal y condenó el aleteo de tiburones, que es la práctica de quitarles las aletas y luego lanzarlos al mar para que mueran desangrados y desmembrados.
USO DE ALETAS
Las aletas de tiburones son usadas para elaborar una costosa sopa que se vende especialmente en los mercados asiáticos, y el costo de un kilo de ese producto oscila entre los 20 y los 40 dólares en Colombia o Panamá, según la agencia de noticias AFP.
Fuente: La Estrella
MARLENE TESTA/SERV. INTERNACIONALES
No hay comentarios:
Publicar un comentario