Activistas iniciaron una firme campaña para terminar con el uso de los ejemplares en el “Colegio de Lobos” del Centro de Investigación y Recreación Marino perteneciente a la Municipalidad de Iquique. Denuncian que los animales están estresados porque son obligados a trabajar y que el recinto donde habitan no cuenta con condiciones mínimas de seguridad. Lo último, porque en abril de este año dos lobas murieron electrocutadas por malas instalaciones al interior del Centro de Rescate Marino.
También en el lugar, a principios de febrero, falleció la primera cría de lobo marino nacida en cautiverio en el país (hijo de Mia, ejemplar que pereció por la descarga).
Por otra parte, durante 2007, el canal Iquique TV informó que veterinaria responsable de los mamíferos tras exámenes diagnosticó que éstos presentaban afecciones en la piel y síntomas de estrés por la constante presión de sus entrenadores.
Según el grupo de Facebook “Lobos libre en Iquique”, el recinto en que habitan los animales funciona con parámetros mínimos y que la ley escasamente exige y fiscaliza. “Las razones de esta campaña son para terminar con la explotación y con la mala infraestructura del centro. No queremos que mueran más lobos por descuido humano. Ya es tarde para reinsertarlos en la vida silvestre pero nunca es tarde para brindarles un mejor lugar”, explican.
Piden a las autoridades del Servicio Nacional de Pesca que retiren la autorización que tiene el municipio para que el recinto deje funcionar como centro de exhibición. Y que la Municipalidad de Iquique costee todo los gastos que sean necesarios para el traslado y mantención de los lobos.
El domingo 9 de mayo se reunirán en la plaza Condell para recolectar firmas. Esto a partir de las 12 horas.
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