Luces, color, sonidos y olor a pólvora. Las doce de la noche, tanto en navidad como durante año nuevo, son sinónimo de reunión, mucha comida y festejos. Por costumbre o tradición, también se festeja con fuegos artificiales que año tras año colman los hospitales del conurbano de heridos y quemados. Sin embargo, existe un municipio que es la excepción.
Desde hace más de seis años, el partido de Florencio Varela festeja de una manera distinta, con afectos y emociones pero sin pirotecnia. Este año, al igual que los anteriores, el intendente Julio Pereyra firmó el decreto que prohíbe “la tenencia, comercialización, depósito, venta minorista al público de todo elemento de pirotecnia o cohetería, sea éste de venta libre o no y/o fabricación autorizada”.
Desde el municipio, el secretario de gobierno Andrés Watson explicó que el fin último de la medida es evitar los accidentes y quemaduras: “hemos logrado durante tres años consecutivos no tener heridos por pirotecnia en las guardias de los hospitales. Es gratificante llamar después de las fiestas y enterarse que nadie se quemó”.
“Empezamos en 2003 con la prevención, cartelería y anuncios sobre el peligro de los fuegos artificiales. Hasta que en 2004 hubo un suceso trágico que desembocó en el decreto”, recordó Watson.
El 3 de enero de aquel año, en un supermercado mayorista se declaró un infierno. El depósito clandestino de pirotecnia explotó derrumbando la loza del techo la que calló sobre varios clientes. El fuego posterior terminó de destruir el lugar. Las llamas llegaron a unas garrafas que al detonarse volaron nueve locales vecinos, afectaron las estructuras de dos casas cercanas y estallaron los vidrios de toda la manzana. El saldo fue de cinco muertos.
“Tenemos poder de policía y salimos con defensa civil y personal de inspección general a ver que en ningún comercio se venda pirotecnia. Si se encuentra pirotecnia se multa al comerciante, se clausura el local y se decomisa toda la mercadería. Todavía se escuchan explosiones en las fiestas pero el fin lo estamos logrando y estamos demostrando que hay distintas maneras de festejar, no es imprescindible el uso la cohetería”, apuntó el Secretario de Gobierno.
Además explica que se entiende por fuegos artificiales y no discrimina sobre aquellos que sólo hacen luz, o solo estruendo. Incluye además a los globos de papel. “cualquier composición pírica explosiva o dispositivos que la contengan, preparados con el propósito de producir un efecto visible, audible y/o mecánico”, según se lee en el decreto 2830/11 emanado por el Departamento Ejecutivo Municipal.
“Los globos parecen inofensivos pero hubo casos en el Conurbano de incendios iniciados por la caída de estos globos. Caen aún encendidos sobre quinchos o descampados o alguna fábrica y pueden iniciar un incendio”, destacó ante la consulta de este medio.
A la par de Florencio Varela, el partido de Berazategui se plegó a la medida para así lograr la casi desaparición completa de los fuegos artificiales en una gran parte de la zona sur.
Además de los beneficios destacados por funcionario sobre la prohibición de los fuegos, que favorece de manera indirecta a los vecinos quienes ya no están expuestos a posibles quemaduras o heridas, existen otros agradecidos en la zona: los animales de compañía.
Los perros y los gatos, junto con la fauna de la región, sufre cada estruendo y explosión. Los animales de compañía poseen una capacidad auditiva varias veces superior a la de los seres humanos por lo que cada estallido suena mucho más fuerte para ellos logrando aturdirlos y provocarles dolor, aún cuando la explosión se realice en la distancia. “Es común para las fiestas ver animales perdidos, aún con las correas puestas. Pero es que se desesperan y se escapan de sus hogares buscando alejarse de la pirotecnia”, explicó Watson.
Desde la Asociación Amigos de las Mascotas de Florencio Varela, su presidenta, Hilda Gavilán, celebró la medida: “La prohibición de la pirotecnia significa vida. Los animales enloquecen, salen a correr, se pierden y terminan atropellados. Cada año amanecíamos con animales perdidos por los barrios. Si bien algunas personas compran en otros distritos, mermó mucho y ahora sólo hay algunos estruendos y por pocos minutos después de las doce”.
“Siempre hacemos campaña y pedimos por internet o los diarios que tratemos ese día de tener los perritos adentros, encerrarlos, para que no tengamos el problema de la desaparición del animal. Desde que se comenzó a prohibir mermo un 80% la utilización de pirotecnia y los animales perdidos”, rememoró.
Florencio Varela fue el pionero en la región en relación a las medidas para limitar el uso de los fuegos artificiales. Si bien existe un proyecto de ordenanza municipal para que la prohibición sea durante todo el año y sin modificaciones, por el momento se necesita del decreto para mantener la navidad en silencio. Tanto el funcionario como la defensora de los animales esperan que la norma provincial que prohibiría la cohetería en todo el territorio de Buenos Aires logre ser sancionada y que rija antes de las próximas fiestas. Hasta la fecha la ley provincial alcanzó media sanción y se espera su tratamiento para la ejecución definitiva de la limitación.
Fuente: http://24con.infonews.com/conurbano/nota/61138-un-distrito-del-conurbano-prohibio-toda-la-pirotecnia/
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